Con 41 pies de longitud, 27 pies de ancho y 12 pies de altura, el BOBST SP 162 CER es un troquelador de gran tamaño. Su robusta construcción soporta sus altamente fiables tasas de producción, permitiendo la entrega de cartones troquelados, totalmente despojados, separados, apilados y contados por lotes, hora tras hora, día tras día.
Lo cual es genial cuando se instala pero causa algunos problemas cuando se necesita reubicarlo. Con 75 toneladas - que es el equivalente a unos 15 elefantes - es un equipo muy pesado. Mover uno sería bastante difícil. ¿Pero qué hay de reubicar tres, a lugares separados a través de los Estados Unidos?
Ese es exactamente el desafío que un diseñador y fabricante líder de envases para productos comerciales enfrentó. Con la expansión de su flota de máquinas, sin juego de palabras de la Marina, necesitaban reubicar tres máquinas BOBST SP 162 CER de su sitio en el noreste de los Estados Unidos, a otros tres sitios en varios lugares a través de los Estados Unidos continentales: el más lejano estaba en California.
Se contactó con BOBST para supervisar la reubicación, que cuando se trata de maquinaria de última generación como esta, requiere de conocimientos especializados.
Los veteranos de la marina se aseguran de que el proyecto se mantenga a flote y siga su curso
Supervisando el proyecto estaban Danny Sides, Gerente de Cuentas Estratégicas de BOBST, y Brian Ewart Especialista de Instalación de BOBST TSS. Coincidentemente, ambos son veteranos de la Marina de los EE.UU., y es igual de bueno, porque esta reubicación fue tan estratégica como una operación militar!
"Fue genial trabajar con Brian en este proyecto porque tenemos antecedentes muy similares en la Marina y pudimos aplicar el mismo nivel de planificación y calma de estilo militar a un proyecto muy desafiante", dijo Danny Sides. Esta decisión pragmática y tranquila, es la razón por la que creo que hicimos un gran trabajo en nombre de nuestro valioso cliente".
El equipo de reubicación de BOBST se enfrentó a varios retos. Sin embargo, ninguno mayor que el de tener que coordinar la logística de estos traslados a gran escala, manteniendo al mismo tiempo la salud y el bienestar de las tripulaciones técnicas durante una pandemia mundial.
Otro desafío único fue que una de las máquinas no había estado en funcionamiento durante mucho tiempo: se le habían quitado piezas para realizar reparaciones críticas en otros equipos. Esto requería un trabajo de diagnóstico minucioso por parte de los técnicos de servicio de campo (FST) de BOBST para identificar las piezas faltantes y asegurarse de que se ordenaran y enviaran al equipo en la nueva ubicación de la máquina.
"Los verdaderos héroes de esta historia son nuestros FSTs que nunca antes habían visto esta máquina exacta en sus vidas. Pero con un esfuerzo hercúleo, fueron capaces de reconstruirla y ponerla en producción en sólo 16 días", dijo Danny. "Cualquiera que sea la situación, nuestro equipo está enfocado a la solución y comprometido a ayudar a nuestros clientes". No podría estar más orgulloso de los FST en este proyecto".
La primera máquina se ha reubicado e instalado con éxito y las otras dos se reubicarán en breve. Mientras tanto, nuestro cliente continúa comprando muchas piezas nuevas de equipos Bobst para modernizar su productividad y aumentar su futura competitividad.
"Creo que un proyecto como este demuestra el compromiso y la dedicación de nuestros empleados de BOBST y el impacto que tenemos en nuestros clientes", dijo Danny. "Nos importa mucho el trabajo que hacemos y la gente a la que afecta. Es más que un trabajo. Siempre haremos un esfuerzo extra cuando lo necesitemos, y en el caso de esta reubicación, ¡hemos viajado muchos kilómetros!"
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